viernes, 13 de septiembre de 2013

La diabetes gravídica transitoria

Durante un embarazo, algunas mujeres pueden presentar pequeñas glucosurias no acompañadas de síntomas de diabetes. La gestación transcurre con normalidad, acaba felizmente y en el puerperio desaparece el azúcar de la orina.

La glucosuria de la gestación puede ser debida a un descenso del umbral de eliminación renal, en forma que, si este normalmente está situado a un nivel glucémico de 170 mg, baja hasta 130 mg, o menos; después de las comidas, el ascenso normal sobrepasa el umbral y aparece glucosuria. Para algunas mujeres se trata de una diabetes renal, transitoria e intrascendente, pero ya he dicho que el embarazo puede ser un factor de realización diabética para la mujer que durante una preñez tiene azúcar en la orina sea una diabética latente y que termine con una diabetes manifiesta si se producen nuevos embarazos, engorda, toma cortisona o quiere adelgazar por su cuenta y riesgo.     

Frecuencia y auge de la diabetes

Por siempre curiosidad, a un diabético puede ser que le interese saber cuántas personas hay con igual trastorno en su localidad, en su país o en el mundo entero. Por razón de oficio, el conocimiento de la frecuencia y auge de la diabetes tiene que ser, para un médico, un motivo que le incite a su estudio y un impulso que le lleve al descubrimiento precoz de los casos recientes, asintomáticos o ignorados.

Para las autoridades sanitarias, la epidemiologia de la diabetes constituye un problema preocupante que, por sus implicaciones médicas, sociales y laborales, en un próximo futuro quizá revista caracteres de suma gravedad.



La frecuencia de la diabetes

Es muy difícil indicar la frecuencia exacta con que se da la diabetes. En primer lugar, no se trata de una enfermedad infectocontagiosa, por lo que su declaración no es obligatoria. En segundo lugar, muchos diabéticos adoptan una actitud de falso pudor y, como si de una <<enfermedad secreta>> se tratara, procuran mantenerla escondida y no revelarla a nadie, y menos aún a las personas que pretenden hacer alguna encuesta estadística.

 Muchos estudios que se han intentado, efectuando análisis en grupos de población, han tropezado con la resistencia pasiva o activa a dejarse extraer sangre o a la recogida  de muestras de orina. Por otro lado, admitiendo como veraces los resultados de las encuestas y las revisiones, topamos con el inconveniente de que solo son aplicables a un grupo concreto de población, por ejemplo, obreros de una fábrica, alumnos de una escuela o empleados de un gran almacén, sin dar idea de su frecuencia en todas las edades, en ambos sexos y en diversas condiciones sociales.

Únicamente por la estimación de datos dispersos podremos llegar a tener una idea bastante aproximada de la magnitud del problema.


Por su simplicidad, los análisis de la orina son los que más se han empleado para la detección de las diabetes latentes o ignoradas. Los médicos de las compañías de seguro de vida indican que hay un...                   

miércoles, 11 de septiembre de 2013

La diabetes química


Se da en aquella persona que no presenta síntomas, signos o complicaciones de diabetes, pero en la que los resultados de los análisis son positivos. Estas diabetes asintomáticas e ignoradas corresponden casi siempre al tipo de diabetes del adulto. 

La diabetes potencial


Decimos que una persona es un diabético en potencia cuando hay varios miembros de la familia que presentan la enfermedad, en especial cuando lo son el padre y la madre y algún hermano. También es sospechoso de diabetes potencial la mujer que ha tenido hijos que al nacer pesaban más de lo normal o cuyos embarazos han terminado en aborto, así como aquella a quien se le han muerto los hijos al poco de nacer.

Las personas con diabetes potencial no acusan trastorno alguno y los análisis son siempre normales, pero tienen el peligro de volverse diabéticas si aparece en ellas alguno de los factores de realización, en especial una obesidad, embarazos repetidos y administración de drogas u hormonas diabetógenas.    

La diabetes latente


El diabético latente es una persona normal, pero que en otro tiempo presento la enfermedad, generalmente cuando era obeso, durante una grave infección, en el curso de un embarazo, inmediatamente después de un infarto de miocardio o durante un tratamiento con cortisona o tiroxina. Al desaparecer estos factores de realización los síntomas de la diabetes cesan y los resultados de los análisis llegan a normalizarse. 

Únicamente con pruebas diagnósticas especiales puede conocerse esta situación.

La diabetes latente casi siempre revierte a diabetes manifiesta y permanente cuando actúan de nuevo los factores de realización que la habían provocado.  

jueves, 8 de agosto de 2013

La diabetes de la madurez

Cuando la diabetes comienza después de los 30 años casi siempre corresponde al tipo llamado diabetes grasa, por asociarse muy a menudo a la obesidad. Su comienzo es lento e impreciso, los síntomas a menudo son poco acusados y casi nunca hay acetona. Este tipo de diabetes  es insulinoindependiente; para su tratamiento solo requiere régimen, y eventualmente la administración de comprimidos hipoglucemiantes. Se designa también como diabetes tipo II o diabetes tipo MOD, <<maturity onset diabetes>>.

Sin embargo, algunas diabetes de la madurez con el tiempo pueden transformarse en diabetes insulinodependientes con las mismas características que presenta la diabetes juvenil. Este cambio, unas veces transitorio y otras permanentes, puede deberse a la aparición de un proceso intercurrente, tal como una infección o un traumatismo grave, al abandono del régimen, a la persistencia de la obesidad, al sedentarismo, o bien puede originarse sin causa conocida, solo con el transcurso de los años. 

La diabetes latente      

El diabético latente es una persona normal, pero que en otro tiempo presento la enfermedad, generalmente cuando era obeso, durante una grave infección, en el curso de un embarazo, inmediatamente después de un infarto de miocardio o durante un tratamiento con cortisona o tiroxina. Al desaparecer estos factores de realización los síntomas de la diabetes cesan y los resultados de los análisis llegan a normalizarse. Únicamente con pruebas diagnósticas especiales puede conocerse esta situación.

La diabetes latente casi siempre revierte a diabetes manifiesta y permanente cuando actúan de nuevo los factores de realización que la habían provocado.

La diabetes potencial         

Decimos que una persona es un diabético en potencia cuando hay  varios miembros de la familia que presentan la enfermedad, en especial cuando lo son el padre y la madre y algún hermano. También es sospechosa de diabetes potencial la mujer que ha tenido hijos que al nacer pesaban más de lo normal o cuyos embarazos han terminado en aborto, así como aquella a quien se le han muerto los hijos al poco de nacer.
diabetes de la madurez


Las personas con diabetes potencial no acusan trastorno alguno y los análisis son siempre normales, pero tienen el peligro de volverse diabéticas si aparece en ellas algunos de los factores de realización, en especial una obesidad, embarazos repetidos y administración de drogas u hormonas diabetógenas.

La diabetes química        

Se da en aquella persona que no presenta síntomas, signos o complicaciones de diabetes, pero en la que los resultados de los análisis son positivos. Esta diabetes asintomática e ignorada corresponde casi siempre al tipo de diabetes del adulto.

La diabetes gravídica transitoria

Durante un embarazo, algunas mujeres pueden presentar pequeñas glucosurias no acompañadas de síntomas de diabetes. La gestación transcurre con normalidad, acaba felizmente y en el puerperio desaparece el azúcar de la orina.


La glucosuria de la gestación puede ser debida a un descenso del umbral de eliminación renal, de forma que, si este normalmente está situado a un nivel glucémico de 170 mg, baja hasta 130 mg, o menos; después de las comidas, el ascenso normal sobrepasa el umbral y aparece glucosuria. Para algunas mujeres se trata de una diabetes renal, transitoria e intrascendente, pero ya he dicho que el embarazo puede ser un factor de realización diabética para la mujer predispuesta, y lo que más a menudo ocurre es que la mujer que durante una preñez tiene azúcar en la orina sea una diabética latente y que termine con una diabetes manifiesta si se producen nuevos embarazos, engorda, toma cortisona o quiere adelgazar por su cuenta y riesgo.       

lunes, 5 de agosto de 2013

La diabetes infantil y juvenil

La diabetes que aparece durante el periodo de desarrollo representa un 25 por 100 de los casos. Se caracteriza por la rapidez con que se instauran los síntomas característicos de la enfermedad: polidipsia, poliuria, cansancio, adelgazamiento, deshidratación y cetosis, es decir, aparición de acetona en la orina y en el aliento. No son ninguna excepción los casos en que, a los pocos días, aparecen vómitos y somnolencia, que culminan con la pérdida de la conciencia y el terrible coma diabético

Un régimen adecuado y la administración de insulina son obligatorios. En principio, cuando la diabetes se desarrolla antes de los 30 años de edad es una diabetes insulinopriva o insulinodependiente, es decir, la vida y el bienestar dependen de la inyección diaria de la dosis necesaria de insulina.

Después de un periodo inicial tumultuoso, y bajo los efectos de un tratamiento adecuado, es frecuente que la diabetes pierda gran parte de su severidad inicial. El niño o el muchacho necesitan reducir su dosis de insulina y en algunos casos – pocos – pueden prescindir totalmente de ella sin que aparezca ningún trastorno. Pero después de este periodo de mejoría – casi podríamos decir de latencia - , cuya duración puede ser de semanas o meses, los síntomas de la afección reaparecen con su prístina intensidad. Esta recrudescencia coincide generalmente con la aparición de cualquier proceso infeccioso trivial, de las primeras menstruaciones o de la pubarquía viril.

La diabetes infantil y juvenil  que acabo de describir suele designarse en las publicaciones especializadas como diabetes tipo 1 o también como diabetes tipo YOD, abreviación de las palabras inglesas <<young
onset diabetes>>.


En casos muy excepcionales esta recrudescencia de la diabetes no se produce y el niño o el muchacho sigue indefinidamente con una diabetes leve controlable con dieta y, eventualmente, con la administración de comprimidos hipoglucemiantes. En estos casos tan afortunados, la diabetes tiene las mismas características que la diabetes del adulto y por tal razón se la denomina diabetes tipo MODY, de <<maturity onset diabetes of the Young>>, o sea diabetes de la madurez en los jóvenes.